Presentación Económetro 2020
APARICIONES EN MEDIOS
CONCLUSIONES
El segundo Informe Económetro 2020 se elaboró a partir de la opinión de 232 economistas adscritos al Colegio de Economistas de Asturias, lo que supuso una representación del 13,7% del colectivo total, quienes participaron en la encuesta sobre la situación económica del Principado de Asturias.
Este análisis económico a corto plazo se estructura en dos bloques. En primer lugar, un conjunto de cuestiones recurrentes, que se repiten entre ediciones, con el fin de facilitar la comparabilidad de los resultados, sobre la situación económica personal y de Asturias, así como sobre otros temas clave para el cálculo de un índice de confianza.
El deterioro de la confianza se aprecia claramente en la percepción que tienen los economistas de su situación económica personal, ya que el 53,9% piensan que es igual o mejor que hace 12 meses, pero solamente el 38,8% opinan que dentro de otros 12 meses seguirá siendo igual o habrá mejorado. Simultáneamente, solo el 49,6% de los encuestados piensa que su hogar podrá ahorrar en los próximos 12 meses.
Las percepciones son más pesimistas cuando se les interroga sobre la situación económica de Asturias. El 82,7% de los encuestados valoran que ha empeorado con respecto a hace doce meses, y el 86,2% opinan que la situación económica será peor dentro de otros doce meses. El mismo pesimismo se aprecia en relación con la percepción sobre la evolución futura del desempleo en Asturias, ya que el 91,3% de los participantes piensa que aumentará en los próximos doce meses.
En este segundo Económetro, correspondiente al año 2020, el resultado del índice de confianza (I-CEA) 2020, elaborado a partir de estas valoraciones, toma un valor negativo, concretamente de -43,79, en una escala de -100 a 100, lo que trasmite una percepción de desconfianza global y pesimismo del colectivo de economistas respecto a su situación económica particular y a la del Principado de Asturias en su conjunto.
Esta percepción se vuelve aún más negativa si se consideran solamente a los economistas que han respondido a la encuesta tras la declaración del estado de alarma, ya que el I-CEA post-COVID19 toma un valor negativo de -48,25 puntos.
Interrogados sobre los principales factores de competitividad de la economía asturiana, los economistas encuestados consideran que la presión fiscal, las infraestructuras y comunicaciones y el precio de la energía son, por este orden, los factores que influyen de forma más importante en la misma.
En segundo lugar, el Económetro incluye una serie de cuestiones no recurrentes, relativas a algunas de las principales cuestiones que afectan a la economía asturiana en el momento de su realización.
En esta ocasión estas cuestiones han sido las siguientes. En primer lugar, la adecuación del Presupuesto 2020 del Principado de Asturias a las necesidades de la Comunidad Autónoma, valorándolo el 56,5% como poco adecuado y el 17,2% como muy poco adecuado. La existencia de una brecha de género en materia de retribuciones entre hombres y mujeres en el mercado laboral asturiano, que es percibida por el 54,7% de los participantes en la encuesta. El impacto del Bréxit en economía y empresas asturianas, que para el 76,7% será moderado.
Finalmente, interrogados sobre la evolución futura del sector industrial asturiano, el 86,2% considera que va a continuar siendo un factor importante para el crecimiento de la economía regional y la creación de empleo.
En estos momentos el Económetro no podía ser ajeno a las consecuencias del estado de alarma decretado el 14 de marzo del 2020, a raíz de la pandemia del COVID-19. En consecuencia, adicionalmente, se ha preguntado también sobre los efectos del COVID-19 en la economía española, en lo que respecta a la situación de la misma para afrontar esta crisis, las medidas de política económica adoptadas, sus efectos en la economía asturiana y las previsiones de recuperación.
Para el 62,4% de los encuestados la economía española está en peores condiciones que en el año 2008 para afrontar esta crisis, el 81,4% opina que las medidas de política económica implementadas no son las adecuadas para paliar la destrucción de tejido empresarial, el 72,4% cree que la situación económica no se va a revertir a corto plazo y más de la mitad, el 55,2%, entiende que el impacto de la crisis será menor en Asturias que en otras regiones.