El pasado 19 de marzo se presentó en la sede del CEA el informe "Panorama de fiscalidad autonómica y foral 2024", informe elaborado por el Registro de Economistas Asesores Fiscales del Consejo de Economistas, REAF-CGE, que recoge el desarrollo de la capacidad normativa en materia de tributos de cada comunidad autónoma. Intervinieron en el acto el decano del CEA, Abel Fernández, y el presidente del REAF, Agustín Fernández.
El Colegio Profesional de Economistas de Asturias presentó el pasado 19 de marzo el estudio Panorama de la Fiscalidad Autonómica, poniendo el foco en la realidad regional asturiana. Se trata de un informe elaborado por el Registro de Economistas de Asesores Fiscales (REAF) del Consejo de Economistas de España que busca arrojar datos objetivos, sin sesgo, en cuanto a la situación de la fiscalidad.
El objetivo de este estudio, que celebra su XIII Edición, es hacer más comprensible la compleja fiscalidad autonómica, haciendo una recapitulación de los principales aspectos en torno a impuestos, beneficios fiscales y recaudación del año 2023 y analizando las principales novedades aprobadas para este 2024.
Los datos de este 2023 reflejan que Asturias tiene una regulación amplia y profusa en lo relativo al panorama fiscal, pero con escasos beneficios y que afecta a pocos contribuyentes. Se han producido 64 modificaciones normativas, las cuales 25 corresponden al IRPF, 2 al Impuesto sobre el Patrimonio, 16 en el Impuesto sobre sucesiones y donaciones y 21 en el impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, pero ninguna de ellas ha sido una modificación sustancial. Además, Asturias sigue manteniendo una presión fiscal alta en lo relativo a sucesiones y donaciones.
Estos datos fueron desgranados por el decano del Colegio de Economistas, Abel Fernández y por el presidente del REAF del CGE, Agustín Santiago Fernández.
Al respecto, el presidente del REAF hizo una valoración de la situación nacional e indicó que el importe total de los tributos recaudados por el Estado se incrementó en un 14,36% de 2022 respeto al año previo, subiendo la recaudación de los impuestos principales debido a un incremento de actividad y por la inflación interanual. Además, también explicó que la introducción de un nuevo impuesto de solidaridad a las grandes fortunas ha provocado que varias comunidades autónomas hayan ajustado sus estrategias fiscales en el Impuesto sobre Patrimonio para proteger parte de la recaudación.
A continuación, el decano del Colegio de Economistas detalló la situación asturiana. El primer impuesto al que se hizo referencia fue al IRPF (Impuesto sobre la renta), destacando que Asturias es una de las comunidades autónomas más cara, tanto para el tramo más bajo, que fija un tipo del 10 % y solo es superado por Cataluña, como para el tramo de rentas más altas, siendo el cuarto más alto (25,5%), superado por Canarias (26%), La Rioja (27%) y C. Valenciana (29.5%).
También, respecto a este impuesto, el CEA señaló que en Asturias se prorrogó la deducción por adquisición de vehículos y que Asturias es una de las comunidades autónomas que no ha bajado sus tarifas para contrarrestar el efecto de la inflación.
El siguiente impuesto al que hizo referencia fue el Impuesto de Patrimonio. El tramo mínimo de este impuesto se equipara al a norma estatal, en 700.000 euros, mientras que el último es inferior a la norma estatal (3%). Esta situación produce que los patrimonios altos también afronten un pago por el impuesto de grandes fortunas. No obstante, en este impuesto existe una bonificación del 99% para aquellos bienes y derechos que formen parte del patrimonio protegido del contribuyente.
Además, tal y como mencionó el decano, Asturias es la comunidad autónoma con el Impuesto de Sucesiones más elevado. Aunque existen reducciones, es la comunidad donde más pagan los herederos, ya que estas solo se aplican hasta 300.000 €. Las herencias más elevadas de esta cifra deben pagar ese impuesto.
También es una de las comunidades autónomas en las que más se paga el Impuesto de donaciones. Al respecto, cabe destacar que hubo una serie de pequeñas modificaciones en las tarifas de los grupos I y II, ya que previamente había 7 tramos de tributación y ahora hay 5. Eso se tradujo en una reducción del tipo impositivo en los primeros 150.000 €, así como un incremento de la tributación a partir de los 600.000 €. Respecto a las bonificaciones, se sigue la senda del resto de CCAA.
Finalmente, en lo relativo al Impuesto de Trasmisiones Patrimoniales, existe una regulación de diferentes tipos entre el 8 y el 10% en la trasmisión de inmuebles según valor. Hay muchos tipos reducidos en función a las circunstancias y reducciones, pero el más relevante es en lo relativo a la adquisición de vivienda en zonas rurales (4-6%).
Y, respecto a los Actos Jurídicos Documentados, se aplica un tipo superior al estatal (1,2% en Asturias respecto al 0,5% nacional). También existen tipos reducidos en función de las circunstancias.
En definitiva, Asturias sigue manteniendo una presión fiscal alta, especialmente en lo relativo a los impuestos de la renta, como de sucesiones y donaciones.